Patrones melódicos

Tetracordios ascendentes con progresión por segundas diatónicas ascendentes.

Progresión de tetracordios por segundas

Tetracordios ascendentes con progresión por terceras diatónicas ascendentes.

Progresión de tetracordios por terceras

Tetracordios descendentes con progresión por segundas diatónicas descendentes.

Progresión de tetracordos por segundas

Tetracordios descendentes con progresión por terceras diatónicas descendentes.

Progresión de tetracordos por segundas

Partes de la guitarra

Para poder dominar la técnica es necesario, en primer lugar, conocer el lenguaje del guitarrista, en primer lugar, los nombres de las diferentes partes del instrumento.

partes-de-la-guitarra

 

Partes de la Guitarra

Muchas son las partes de la guitarra. Algunas tienen una función ornamentativa, como por ejemplo la roseta que adorna a la boca; otras tienen una función de amplificación del sonido, como la caja de resonancia y la boca; y otras partes tienen como objetivo la producción de un sonido definido, como las cuerdas, la cejuela, la selleta o los trastes. A continuación se verá en profundidad la utilidad de cada parte.

Cuerdas

Al vibrar producen el sonido habitual del instrumento. Su sonido depende de varias cosas: Cuanto más cortas son (longitud) más agudo es su sonido, cuanto más largas más grave. También su grosor afecta al sonido, las más finas son agudas mientras que las más gruesas suenan más graves. De forma similar afecta el material con el que fueron construidas, las cuerdas de acero producen, a un mismo grosor, alturas más graves que las de nylon. Y por último afecta la tensión de las cuerdas, las menos tensas producen sonidos más graves que las más agudas. Las cuerdas se pulsan o arañan con una mano mientras que se presionan con la otra mano. En un diestro se pulsarían con la mano derecha mientras que se presionan con la izquierda.

Caja de resonancia

La caja de resonancia amplifica el sonido de las cuerdas, haciendo que este suene más fuerte. También modifica el sonido propio de las cuerdas así como una caverna produce eco y modifica el sonido de quien grita dentro de ella.

Boca

La boca funciona de conexión entre las cuerdas y la caja de resonancia. Sin ella sería como que alguien gritara en Madrid esperando el eco de una caverna en Andalucía.

Clavija

Sirve para ajustar la tensión de las cuerdas, al estar más tensas suenan más agudas y fuertes, al estar menos tensas suenan más graves y débiles. Al ajustar la tensión de la cuerda se busca lograr una afinación deseada. La afinación más común de las cuerdas de la guitarra es Mi (E2), La (A2), Re (D3), Sol (G3), Si (B3), Mi (E4).

Traste

Los trastes hacen que cuando el guitarrista presione una casilla varíe la longitud de la cuerda. Hacen que la cuerda no vibre en su totalidad, sino desde él hasta el puente. Cuando ningún traste es presionado la cejilla funciona de primer traste, por lo que la cuerda nunca suena en su totalidad.

Pizzicato

El pizzicato, también conocido como muteado en la guitarra eléctrica, consiste en tapar con la palma las notas que se tocan con el pulgar. Esto le da un sonido similar al efecto de los cordófonos de cuerda frotada. Se utiliza en las composiciones desde el período clásico, especialmente común en la obra de Paganini y Fernando Sor.

El rasgueo

El rasgueo es una técnica que consiste en tocar varias cuerdas en un sólo movimiento de la muñeca del brazo derecho o de un dedo de la mano.

Si bien fue usado en la música clásica, especialmente en el período barroco (véase Guitarra Barroca), en general es una técnica más frecuentemente usada para acompañar al canto o la melodía generalmente en la música popular. Incluso existe el concepto de «Guitarra rítmica», que es la manera de llamar a la guitarra que marca el ritmo con rasgueos y se contrapone a la «Guitarra guía», que suele puntear y arpegiar.

Existen dos formas diferentes de efectuar los rasgueados, con la muñeca o con los dedos. En los rasgueos de muñeca pueden participar los dedos y viceversa, pero en general el mayor movimiento siempre se encontrará en una zona y otra. La práctica de los rasgueos de dedo favorecerán al toque apoyando.

Rasgueos de dedo

Es fundamental para que el rasgueo en dirección hacia abajo sea más fuerte que el contrario que se comience el movimiento desde la yema del pulgar, como haciendo una toba, haciendo resbalar el dedo en cuestión.


image/svg+xml Generated with Qt I i i II m i i III a i i IV a m i i V c a m i i

Se debe partir con el dedo que ataca inicialmente preparado en la yema del pulgar, preparado para atacar. También debe estar preparado el dedo del ataque siguiente. Luego de terminar cada ciclo se debe utilizar la vuelta en dirección hacia arriba del índice para hacer retornar a los demás dedos a su posición inicial.

Rasgueos de muñeca

Los rasgueos de muñeca se pueden ejercitar tanto con púa como con dedos. En un rasgueo para arriba suele utilizarse el pulgar, mientras que e n un rasgueo para abajo suele ser la dupla entre el medio y el anular, aunque también puede practicarse con índice. A continuación se presentan unos patrones rítmicos a practicar, en compás de dos negras, es decir 2/4:


image/svg+xml Generated with Qt I II III IV V VII VIII VI

Slap y Pop

Otro recurso, especialmente utilizado en el bajo y por extensión en la guitarra es el slap y el pop, o pizzicato “Bartok”. El segundo ya se utilizaba en la música clásica por influencia de la técnica del contrabajo. El slap consiste en un golpe efectuado con la segunda falange del pulgar sobre alguna cuerda específica del diapasón, ésto le da a la misma un sonido percutivo, se suele combinar con un pizzicato “Bartok” en la primera cuerda, generalmente muteada con la mano izquierda. Por otra parte, el nombre pizzicato “Bartok” tiene un problema, y es que por muy standard que sea su uso, el mismo puede ser efectuado naturalmente o también pizzicato, ya que nada le impide al guitarrista mutear las cuerdas al tiempo que efectúa el pop. Entre las obras que utilizan ambos efectos se encuentra “Libra Sonatina” de Roland Dyens.

Trémolo

El trémolo consiste en un efecto que busca emular el sustain del que gozan los instrumentos de viento y los violines. Especialmente exitoso en salas con abundante reverberación, consiste en una fórmula de la mano derecha que se repite constantemente, normalmente pulgar, anular, medio índice, en el caso del trémolo de semicorcheas. El pulgar alterna entre dos o más bajos mientras los dedos anular, medio e índice tocan una melodía cantabile. Diversas composiciones del repertorio están basadas exclusivamente en el recurso tales como la ya mencionada “Recuerdos de la Alhambra” de Tárrega, “Una limosna por el amor de Dios” de Agustín Barrios, “Estudio” de Manuel Ponce, la tercera de las “Piezas características” de Moreno-Torroba. Existe también el trémolo en el flamenco, éste no es un grupo de cuatro semicorcheas sino un quintillo de la misma unidad que algunos lo ejecutan pulgar (bajo), luego meñique, anular, medio e índice. Sin embargo, hoy quedan pocos que adoptan ésta forma, prefiriendo en general la fórmula pulgar, índice, anular, medio e índice. Es importante destacar que, aunque ha sido escrito alguno que se salía de esta norma, en el trémolo más común jamás toca el bajo junto con índice, medio u anular. Las formulas que violan lo dicho anteriormente siempre son más torpes y lentas, no aptas para un trémolo. Además, cuando alguien escribe esta rareza, los ejecutantes suelen cambiar por el trémolo habitual.

Tirando

Las necesidades contrapuntísticas del renacimiento dieron paso para que la guitarra occidental desarrollara el toque libre o ‘tirando’, en esta técnica la mano se apoya en el vacío y los dedos pulsarán las cuerdas, en dirección a la palma. Esta es la técnica más frecuente de la guitarra clásica, pues amoldarse bien tanto al toque placado como el arpegiado. Pero su deficiencia de volumen y proyección otros guitarristas hicieran uso de un toque similar, tirando, pero con mayor presión sobre la cuerda, llamado semi-apoyado. Éste requiere un tiempo de preparación mayor y sólo se utiliza por momentos. El toque libre, con el que se suele hacer uso de los cuatro dedos (p, a, m, i) es sin duda el más veloz de los toques, esta fórmula y otras similares se encuentran en perfecto dominio por parte de los guitarristas a causa del efecto llamado trémolo, que también se efectúa con toque libre. También la figueta, recurso que suelen dominar los guitarristas que además son laudistas.

Ejercicio elemental para el toque tirando

El ejercicio puede hacerse tanto con cuerdas al aire (ej.: 4ª, 3ª, 2ª y 1ª) o arpegiando un acorde, en cuyo caso, el pulgar debería pulsar la nota fundamental del acorde.
EMDEF

Ejercicio para para la independencia del pulgar

En una primera instancia ejercitar el ejercicio tirando, luego se debe ejercitar apoyando el pulgar, repitiendo en bucle cada cuadro.

C2EP

Agregar el pulgar al ejercicio anterior, también repitiendo a piacere.
C2EB

Así como en ejercicio anterior, se puede practicar simplemente utilizando cuerdas al aire, o secuencias de acordes.

Tapping

El tapping es una técnica que siempre se utilizó en guitarra clásica, asociada a los ligados, Fernando Sor y Giuliani habían escrito música con tapping de mano izquierda, sin embargo, su verdadera importancia radica en la mano izquierda. Consiste en hacer sonar los sonidos pero sin pulsarlos, por la propia percusión entre la cuerda y el traste que se produce al pulsar con fuerza. Algunos compositores contemporáneos también han introducido la técnica de la guitarra eléctrica en la guitarra clásica. El propio Stanley Jordan ya había ejecutado en público su técnica en guitarras electroacústicas de cuerdas de nylon, pero no activamente. Quien se ha caracterizado por el recurso es guitarrista clásico y también eléctrico Andy McKee, célebre por su composición “Drifting”. Sin embargo, sólo puede ser efectuado en ambientes pequeños de silencio extremo, de otra forma es necesario amplificar el instrumento.

Tambora y percusiones

La guitarra clásica también incluye golpes en la tapa, que se introducen en la segunda mitad del siglo XIX. El más frecuente es la tambora, que consiste en golpear la zona de la cuerda cercana al puente con el pulgar. Especialmente utilizado en la obra de Abel Carlevaro y en compositores que dedicaron composiciones al mismo tales como el francés Maurice Ohana (1913 – 1992). También hay una tambora sorda, que no deja sonar a las cuerdas y se golpea sobre el puente.

Plectro

Plectro es la forma genérica para designar a accesorios como la púa, el plectro de biwa, la risha del ud árabe, el Bachi del shamisen o tantas otras piezas similares. Caparazón de tortuga, cuero seco, paja, pluma, madera, bambú, metal, celuloide, nylon, tortex, delrin, lexán: Se los ha creado de infinidad de materiales según cada región e instrumento, aunque ciertamente es la púa triangular de plástico la más standard entre los guitarristas. Puede ser un reemplazo de las uñas, un efecto o simplemente una ayuda a las mismas, en el caso del toque híbrido.
Los grosores de las púas de guitarra varían para acomodarse a las diferentes tímbricas que busca cada estilo de ejecución, consiguiendo un timbre más brillante y con un ataque más percutivo y pronunciado la púa más fina y otro más profundo con ataque más lento la púa gruesa. La durabilidad de la púa fina es menor que el de la gruesa, que es más resistente, razón por la que generalmente se selecciona el grosor de la misma según el de la cuerda.
La guitarra clásica y su repertorio han abandonado el uso de plectros desde tiempos inmemoriales únicamente insinuado en alguna obra del siglo XX como por ejemplo en el «Paisaje Cubano con lluvia» de Leo Brouwer (1939), en donde se pide que los trémolos se toquen “tipo púa”, pero sin la misma, haciendo uso de la uña del índice en relevo de la misma. Sin embargo el uso de plectros es frecuente en músicas étnicas y en la guitarra eléctrica. Se debe considerar que el efecto “distorsión”, tan frecuentemente usado en la última, obliga al ejecutante a adoptar un estilo de escritura melódico y velocista, al cual se adapta la púa mucho mejor que los dedos.
Para notar la púa se suele por utilizar analogía la simbología del arco del violín, es decir los símbolos abajo ( ∏ ) y arriba (˅)1. Sin embargo, por influencia anglosajona, es frecuente ver la alternativa de las letras ‘u’ y ‘d’ haciendo el relevo, abreviando los términos ‘up’ y ‘down’. Esencialmente existen cinco procedimientos asociados al plectro y son habitualmente denominados con la terminología inglesa:
Alternate picking: El plectro anterna direcciones siempre, arriba y abajo o viceversa. Es la forma más frecuente, tanto en arpegios como escalas, mas no desplaza al resto ya que a altas velocidades es dificultoso el control.
Sweep picking: El sweep picking se utiliza cuando en un conjunto de notas en diferentes cuerdas, todas ellas se tocan sucesivamente con la misma dirección de púa, arriba o abajo. Se utiliza frecuentemente en arpegios direccionales, normalmente intercalando algún ligado que completa el arpegio. No se utiliza en arpegios quebrados, en este caso se prefiere alternar la púa.
Economy picking: Se trata de una combinación de los dos procedimientos explicados arriba. Consiste alternar (alternate) la dirección de la púa mientras se toca en una misma cuerda y barrer (sweep) cuando se cambia de cuerda. Es eficaz especialmente cuando se trata de escalas de tres notas por cuerda, donde estas se articulan ∏ ˅ ∏ ∏ ˅ ∏, en el caso de la escala ascendente y lo contrario en el de la descendente.
Hybrid picking: La púa, que es tomada mediante los dedos pulgar e índice, es usada como pulgar melódico mientras el resto de los dedos, incluyendo al meñique, son utilizados para arpegiar. Frecuentemente utilizada en música Country y Bluegrass, especialmente en el banjo. Especialmente útil cuando se deben ejecutar grandes saltos entre cuerdas.
Pick slide: Se le llama de esta forma en el ámbito de la música derivada del rock a un efecto, asiduamente ejecutado con distorsión, consistente en raspar la cuerda longitudinalmente con la púa. Este ruido, que hasta el siglo XX era evitado o considerado mal inevitable, es aprovechado como efecto especialmente en la música “ruidista” para guitarra clásica del siglo XX e incluso pronunciado mediante la púa en la música popular.